Interesante exposición la que se puede visitar en la Fundació Joan Miró de Barcelona hasta el 6 de junio, se trata de la intervención de once "muralistas" invitados para "cubrir" las paredes de las salas donde normalmente hacen las exposiciones temporales. La proporción de un mural enseguida me hace pensar en un fondo de escaparate por su tamaño y complejidad, no lo puedo evitar, ya es deformación profesional.
Me gustó ver las diferentes propuestas, desde las que juegan con formas más geométricas con colores muy saturados -que tan de moda están- hasta las más orgánicas o conceptuales. Resulta curioso, pero en este entorno el graffitti resultaba el más ortodoxo de todos los murales.
Me gustó ver las diferentes propuestas, desde las que juegan con formas más geométricas con colores muy saturados -que tan de moda están- hasta las más orgánicas o conceptuales. Resulta curioso, pero en este entorno el graffitti resultaba el más ortodoxo de todos los murales.
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